El siniestro se registró hacia las 5:45 de la mañana, en inmediaciones de la Clínica Medicádiz, cerca de la empresa Alpina. La comunicadora de 23 años resultó gravemente herida tras colisionar contra un taxi mientras conducía su motocicleta bajo una fuerte lluvia.
El conductor del vehículo de servicio público, con 16 años de experiencia al volante, los minutos de angustia que vivió al ver el impacto y auxiliar a la joven.
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Testimonio del taxista sobre la suspensión de la marcha y el impacto
Según relató, momentos antes del choque se desplazaba a baja velocidad tras dejar un servicio en el Aeropuerto Perales. Debido a la lluvia, el vidrio del taxi se empañó, lo que lo obligó a orillarse para limpiar. En ese instante sintió un golpe seco en la parte trasera del vehículo.
“Yo iba subiendo, no entiendo cómo se estrelló la muchacha. Fue tan impresionante y tan espantoso que no sé qué le pasó. El casco quedó en la mitad de la carretera, no sé si lo traía ajustado. El vigilante de una empresa cercana lo recogió. El impacto lo recibió ella directamente con la cabeza en el pavimento”, relató con evidente consternación.
“Lo más importante es la vida de ella”
Visiblemente afectado, el taxista subrayó que, más allá de los daños materiales en su vehículo, lo único que lo conmueve es la salud de la joven periodista.
“Para mí, más que el carro, que quedó muy averiado, y la moto, lo que prima es la vida de la señorita. La vida es lo más importante en estos momentos. Le pido mucho a mi Dios por ella. La conciencia la tengo tranquila, porque la culpa no fue mía, pero la vida de ella es lo que me preocupa”, señaló.
El conductor, católico ferviente, confesó que en sus años de trabajo nunca había presenciado una situación tan dramática.
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La angustia en el lugar del accidente
El testimonio revela también la impotencia vivida en el lugar del siniestro:
“Casi no podía moverme, las piernas se me entumecieron al verla en la carretera. Ella no se quejaba. Solo un vigilante me acompañó, le pusimos una sombrilla porque la ambulancia no llegaba. Cuando por fin llegaron los paramédicos, ya habían pasado más de 20 minutos. Fue desesperante”, añadió.
Otros transeúntes se acercaron a auxiliar, advirtiendo que no debían mover a la víctima hasta la llegada de la ambulancia, que arribó entre las 6:05 y 6:10 de la mañana, según el relato.
Investigaciones sobre el accidente y estado de salud
La motocicleta de la periodista y el taxi quedaron con graves daños. El conductor de servicio público insistió en que la lluvia y la poca visibilidad pudieron haber sido factores determinantes, aunque subrayó que solo las autoridades de tránsito establecerán las causas exactas.
La joven comunicadora fue trasladada de inmediato a la Clínica Medicádiz, donde permanece bajo pronóstico reservado. Sus familiares, provenientes del municipio de Dolores, llegaron a la ciudad para acompañarla en este difícil momento.
“Nunca había vivido algo así. Lo material no importa, lo que me preocupa es la vida de la señorita”, concluyó el taxista, con la voz quebrada.
Impacto del accidente en la comunidad
El caso ha generado un fuerte impacto en Ibagué, tanto por la gravedad de las heridas de la periodista como por la crudeza del relato del taxista, que pone de relieve la fragilidad de la vida en segundos de imprudencia o circunstancias adversas como la lluvia y la poca visibilidad.
Mientras tanto, las autoridades de tránsito continúan recopilando pruebas, entre ellas cámaras de seguridad de la zona, para esclarecer con precisión cómo ocurrió el siniestro que mantiene a Dayana Guayabo luchando por su vida.
