Lo que era una ilusión ahora se convirtió en una preocupación para 188 familias vulnerables del municipio de Prado.
Luis Motta veedor del municipio de Prado expresó «el proyecto Aquarium fue dejado por la anterior administración municipal de Prado en el año 2018, donde dejó garantizada las obras de urbanismo para tener los servicios públicos, se beneficiarían a 188 familias entre las cuales están 50 familias desplazadas, 30 familias que hacen parte de las comunidades indígenas, entre otras pocos recursos de la población».
Al llegar la nueva administración en el año 2020 el proyecto se paralizó, ya se cumplen 18 meses, al argumentar presuntos hallazgos por parte de la Contraloría.
La comunidad elevó una acción de grupo ante el Juzgado Primero Administrativo de Ibagué, buscando un apoyo por parte de la justicia.