Indisciplina mortal
Este fin de semana, puente festivo, vimos a través de las redes sociales de la Alcaldía de Ibagué, los grandes esfuerzos por preservar la salud y vida de los ibaguereños, con medidas como la ley seca, el toque de queda, y el recorrido de las autoridades por diferentes sectores de la capital tolimense.

A pesar de todos estos esfuerzos, la indisciplina de muchas personas supera toda lógica. Parece no importarles sus vidas ni la de los demás. Organizan asados, fiestas y demás reuniones, por ahora prohibidas, en los andenes y las calles de los barrios. Más de 180 comparendos se impusieron durante el fin de semana a los infractores que sin sonrojo alguno cuestionaban a las autoridades que les están salvado la vida.
No puede ser posible que en medio de la pandemia y de las semanas de mayor contagio, por la llegada inevitable del pico de la enfermedad, muchos ibaguereños continúen como sí no ocurriera nada. Las consecuencias de las fiestas, asados y demás, se verán reflejadas en poco más de 10 días, y por esa irresponsabilidad deben las autoridades de salud enfrentar una posible congestión en las salas de cuidados intensivos.
Andrés Currea H
Las cifras a hoy, son alentadoras, se bajó la ocupación de Unidades de Cuidados Intensivos al 66%, luego de estar en 76% de capacidad en Ibagué. Sin embargo, no se puede bajar la guardia, y se debe ser muy responsable. La administración municipal hace lo que le corresponden, toma las mejores decisiones en pro de salva guardar la vida y salud de los ibaguereños, razón por la cual el “balón” queda en el campo de los ciudadanos, en el autocuidado.
Por ahora no más fiestas, no más reuniones de ocio, por ahora debemos permanecer en alerta, salir de la casa lo estrictamente necesario. Al regresar del trabajo, tomar todas las medidas de protección, esto se trata de cuidarnos nosotros, y asimismo cuidar de todos los que nos rodean. Si hay síntomas o sospechas, llamar a las autoridades encargadas de atender los posibles casos, y ante todo mantener la calma.
Esta semana inició con positivas noticias sobre los avances de los laboratorios en todo el mundo que trabajan sin descanso para hallar la vacuna contra el covid-19, en algunos que ya la han aplicado en humanos durante las primeras pruebas, se observan respuestas alentadoras que abren la puerta de la esperanza.
Si somos responsables y mantenemos una disciplina social adecuada, la tormenta pasará, tal vez, más rápido de lo esperado y así regresaremos a la cotidianidad que tanto extrañamos.