La Administración Municipal atendió la difícil situación de dos adultos mayores del barrio Industrial, que padecen varias complicaciones de salud y viven solos en condición vulnerable.
Anatilde de Ramírez fue diagnosticada con cáncer de mama desde hace tres años, pero a raíz de la pandemia y las dificultades económicas, dejó de recibir tratamiento. Del mismo modo, su hijo Édgar, quien se ha encargado de cuidarla, padece Párkinson.
«Estamos comprometidos con nuestra población más vulnerable y por eso gestionamos el traslado de estos adultos mayores hacia el hospital Federico Lleras Acosta y junto con la empresa privada queremos brindarles un nuevo hogar en el Jardín de los Abuelos, para que ambos disfruten de una vejez digna y tranquila”, señaló Francy Liliana Salazar, secretaria de Desarrollo Social Comunitario.
Es de resaltar que estas personas dedicaron su vida a la venta informal de dulces, entre otros productos, pero ante los quebrantos de salud no pudieron volver a las calles. Familiares cercanos y algunos vecinos apoyaban con la alimentación de estos adultos mayores.
“Todos hemos sido vendedores ambulantes, pero ellos por la enfermedad no volvieron a trabajar. La verdad es que le doy muchas gracias a la Alcaldía por estar pendientes de mi abuela y de mi tío. Sé que son muchos los adultos mayores que necesitan y que tal vez no están todos los recursos, pero esa gestión con entidades privadas lo alegra a uno mucho”, señaló José Daniel Ramírez.
