
La cadena de hechos desafortunados inicia desde aproximadamente las 8:30 y 9:00 de la noche en inmediaciones del parque La Florida en una de las principales salidas de la capital del país.
El camión recolector de basuras de la empresa Ecosiecha de Guasca, Cundinamarca y de placas OKZ 400, era conducido por Hildebrando Rivera Gantiva de 60 años, quien al parecer no vio a la madre 38 años y a su pequeña hija de un año y medio, Rivera no pudo maniobrar el vehículo y las atropelló ocasionando la muerte de la mujer en estado de gestación y su bebé.
Ante la muerte de Erminda Sintua Tunay y Sara Camila García Tunay, entre 10 y 15 personas de la comunidad embera, atacaron el carro recolector donde aun se encontraba Hildebrando, desde allí el conductor intentó llamar al gerente de la empresa Ecosiecha, “Don Mario estoy en el camión, no me dejan bajar, se me atravesó un muchacho, yo no lo vi, estoy en Funza”, relatan que las voz era desesperada, pues los enfurecidos indígenas ya se encontraban destrozando el camión para poder sacar al culpable del accidente.
Lograron ingresar, sacaron a Rivera Gantiva y empezaron a golpearlo con palos, patadas y puños. Aunque la Policía se encontraba en el lugar, y otras personas miraban la macabra escena, nadie intentó detener a los agresores y dejaron al borde de la muerte al hombre de 60 años.
Desde la empresa llamaron nuevamente al trabajador “Estoy llamando al teléfono de Hidelbrando, me contestó alguien y me dijo: ‘No llame más a este hp que lo vamos a matar”, relataron los directivos de Ecosiecha.