
El fútbol es un deporte que une a muchas personas alrededor del mundo, pero desafortunadamente, también hay quienes quieren arruinar esta fiesta. Esto fue lo que sucedió recientemente en Ibagué, cuando un hincha del equipo pijao, identificado como el autor material de romper un vidrio del bus del Junior de Barranquilla, fue capturado por las autoridades y trasladado a un CAI en el barrio Santander.
De acuerdo con la información suministrada por las autoridades metropolitanas, estaban cumpliendo con el dispositivo de seguridad con sus más de 750 uniformados para garantizar la tranquilidad de los aficionados y jugadores. Por un lado, estaban haciendo el acompañamiento de los hinchas del Junior desde el peaje de Alvarado hacia el estadio, mientras que por otro lado, policiales escoltaban el bus del equipo visitante en su desplazamiento desde el hotel hacia el estadio.
Sin embargo, la fiesta del fútbol se vio empañada cuando un hincha desadaptado arrojó una piedra sobre la Avenida Ferrocarril con calle 31, averiando el vidrio del bus del Junior. Afortunadamente, nadie resultó herido en este incidente, pero esto no justifica el comportamiento inadecuado del hincha.
Los uniformados actuaron rápidamente y dieron con la captura del sujeto, que fue trasladado hacia el CAI Phenix del barrio Santander-Estadio. Posteriormente, será llevado a la URI de la Fiscalía, donde se presentará ante un juez por el delito de daño en bien ajeno.
Es importante destacar que la hinchada tolimense repudió este acto vandálico y que el partido se llevó a cabo sin más inconvenientes. Finalmente, el conjunto tolimense se impuso con la mínima diferencia ante el equipo de Barranquilla. Después del encuentro, no se presentó ningún acto de inseguridad con los buses.
Este tipo de situaciones son lamentables y no representan el espíritu deportivo del fútbol. Los aficionados y jugadores merecen disfrutar de un ambiente seguro y tranquilo para poder disfrutar de su deporte favorito. Por ello, es importante que las autoridades continúen trabajando en la prevención y control de estos actos vandálicos para que la fiesta del fútbol no se vea empañada por la violencia y el vandalismo.