
Pero más allá de su valentía y habilidad en situaciones de peligro, Moncho será recordado por su carisma y sus frases inolvidables, como «Maneje los tiempos chinito» y «El que se queme que sople».
Para sus compañeros de trabajo, Moncho ha sido no solo un amigo y maestro, sino también un modelo de disciplina y abnegación.
En este día de despedida, el Benemérito Cuerpo Oficial de Bomberos de Ibagué quiere expresar su agradecimiento a Moncho por sus años de servicio y enseñanza.
Que su pensión esté llena de éxitos y nuevas aventuras. Y aunque nos despedimos de él como bombero activo, sabemos que su legado vivirá en cada uno de nosotros, en cada emergencia y en cada vez que recordemos sus palabras y anécdotas.
Gracias, «Moncho», por 44 años de valor, abnegación y «en la juega chinito».