Rueda una Masa crítica por Ibagué.

La Masa Crítica es un concepto que tiene diferentes sentidos de aplicación, para este caso lo exploraremos como el fenómeno ciclista que tiene lugar a lo largo del año en diferentes territorios urbanos del mundo. Su finalidad es dar a conocer las grandes ventajas que aportan a la movilidad, a la sociedad y al ciudadano, una mayor representación de las bicicletas en las ciudades para reducir las contrariedades que causa el tráfico Automotriz.

El término Masa Crítica es aplicado al referirse a este fenómeno de bici-usuarios en la ciudad y fue adoptado por George Bliss, diseñador estadounidense de vehículos de tracción humana, para hacer referencia a la dinámica urbana observada en China cuando en los cruces sin semáforos, los ciclistas se acumulan hasta llegar a un número tal,  que como cardúmenes humanos les permite cruzar sin riesgo. El fenómeno fue dado a conocer en el documental «Return of the Scorcher» (1992) del director y ciclista Ted White.

Este movimiento social, lo vemos como una alternativa tangible a los problemas que presenta la ciudad de Ibagué en temas de transito urbano; las iniciativas de la comunidad sintetizadas en acciones urbano sociales, que permiten un aprovechamiento espacial de las masas ciudadanas, en lugares que sin este tipo de acciones colectivas, no sería posible retomar el espacio urbano, que nos siguen ganando los vehículos en Ibagué.

Como ciudadanos de Ibagué, caminamos por nuestra ciudad y podemos notar, que la ciudad no responde a las necesidades del cuerpo urbano en su concepto de movilidad; los andenes no son para el ciudadano, por el contrario es el vehículo el que se apodera de la ciudad, caminamos por las calzadas, exponiéndonos a los vehículos que aparte de contar con esta línea de movilidad llamada calzada, se asienta en nuestros andenes que se convirtieron en parqueaderos mal diseñados.

La ciudad de Ibagué no es una ciudad para el peatón, es una ciudad para el carro y eso lo vivimos todos los días los ciudadanos de la musical. La meta social es cambiar nuestras miradas en estas alternativas tangibles como la bicicleta; como nos muestra el mudo globalizado y una de las opciones para fortalecer la movilidad de las ciudades en progreso, es el uso y promoción de la bicicleta.

Son este tipo de estrategias que muestran bajo su efectiva,  las ventajas  que presenta este medio de transporte frente a otros como la motocicleta y el automóvil, pues no produce gases, no requiere combustible fósil, es saludable y no produce emisiones perjudícales para el planeta.  Países como Holanda y Dinamarca son un ejemplo de ello, en la década de 1970 ante el afianzamiento de la cultura del vehículo y las anomalías sociales que produce centrar todos las acciones económicas en el desarrollo de infraestructura vial para el automóvil, comenzaron a reconstruir las redes ciclísticas, para incentivar el uso de la bicicleta. Estos países, se han convertido en un modelo y opción, en materia de movilidad alternativa y sostenible sino por las ventajas sociales y urbanísticas, que el uso de la bicicleta promueve en las ciudades y sus habitantes por que como sistema integrado y conectado, todo lo que afecta  su infraestructura física, afecta a su infraestructura psico-social, cultural y ambiental.

Es el momento de cambiar nuestras coreografías urbanas en la ciudad de Ibagué y las masas críticas que podemos generar para esto, son una alternativa muy fuerte en los proceso de reclamación colectiva para los espacios de la ciudad, no olvidemos que la ciudad en nuestra morada colectiva y es nuestra responsabilidad cuidarle y darle un enfoque coherente para que responda a las dinámicas de su población urbaa, en este caso Ibagué.