Camilo Páramo

Un deporte nuevo para una nueva ciudad

El fracaso de los Juegos Nacionales en nuestra ciudad supuso poner en el centro de la discusión pública la problemática del uso del tiempo libre de los ciudadanos, y en especial la inexistencia de una red de escenarios públicos descentralizados que atiendan de manera eficiente los deportistas de la ciudad.

La destrucción brutal de los escenarios ubicados en las piscinas olímpicas y en el Parque Deportivo dejo ver que, salvo por la existencia de algunas canchas multisport sin medidas reglamentarias suficientes, Ibagué no cuenta con ningún tipo de escenarios deportivos públicos salvo las canchas de futbol del Jordán, del Calarcá  y del Maracaná; algo que se hizo evidente al ver a nuestros jóvenes practicando sus deportes en cualquier parque con riesgo de sus vidas e integridad físicas

Una clara muestra de ello es la proliferación de canchas sintéticas de futbol 5 y 8, las cuales cobran hasta $ 120.000 pesos hora, y que por supuesto solo están al alcance de las clases medias y altas de la ciudad, y para un público cuya edad supera los 20 años.

Sí a esto se le suma que la ciudad no cuenta con un Sistema Integrado de Transportes que permita cruzar la ciudad de un lado al otro con el pago de un solo pasaje y mediante trasbordos entre diferentes medios de transporte; se encuentra sin lugar a dudas que la práctica deportiva en Ibagué está muy lejos de desarrollar todo el potencial de una ciudad joven, pujante y en crecimiento.

Esta realidad se debe analizar desde un contexto histórico y teniendo en cuenta que hasta hace relativamente poco tiempo la ciudad contaba con una población muy centralizada y organizada alrededor de un solo eje vial fundamental: La Carrera Quinta.

Así mismo, las ligas deportivas se han nutrido de los clubes deportivos de los colegios públicos y privados, en quienes se depositó todo el peso de la formación deportiva; donde las ligas solo realizaban el proceso de selección para armar los equipos representativos de la ciudad, que en su mayor parte representaban al Departamento

Esto además, ha centrado el ethos deportivo en los estudiantes, con lo cual no solo se desentendía la población no escolarizada, sino que las ligas perdían los deportistas bachilleres que no seguían una carrera universitaria.

Una prueba de ello es cómo las únicas ligas deportivas que han formado deportistas son aquellas que, como el boxeo, no cuentan con una estructura fuerte en los colegios y que por lo tanto deben buscar sus propios mecanismos de captación de deportistas; ligas que paradójicamente son las que mayor triunfos dan por cuanto terminado el ciclo escolar, los deportistas siguen vinculados a las ligas a costa de muchos esfuerzos personales.

Esto sin contar las dificultades para la práctica de deportes no tradicionales como el skate, ultimate, y en general los deportes asociados al mundo urbano y que en el mundo son un éxito con deportistas que se embolsan ingentes sumas de dinero, pero que siguen siendo vistos con desconfianza en la ciudad al identificarlos con vagos y marihuaneros.

Este sistema ya no es suficiente ni adecuado para la ciudad, pues en tanto la ciudad crece y se multiplican los ejes viales fundamentales, se requiere una multiplicación y descentralización de la administración municipal que, en lo deportivo, se organice con la construcción de una red de escenarios públicos pequeños pero con medidas reglamentarias y presentes en todas las comunas.

Y aunque parezca obvio, se requiere que dentro de las comunas no se centralice en un solo lugar todos los escenarios deportivos, sino que los mismos se construyan de tal manera que nadie tenga a más de 10 minutos a pie un escenario deportivo adecuado para la práctica de algún deporte.

Esto supone no solo que la ciudad realice un esfuerzo constructivo ambicioso, sino también el fortalecimiento del IMDRI con la asignación de un presupuesto suficiente, una planta de personal adecuada y con recursos para empezar desde ya los ciclos olímpicos necesarios para que en el mediano plazo veamos muchos deportistas ibaguereños representando nuestro país en mundiales de las diferentes categorías deportivas.

Finalizo diciendo que no desprecio el esfuerzo ingente realizado por los gallardos deportistas que hoy le han dado alegrías a la ciudad, pues su esfuerzo, dedicación y disciplina son el orgullo de nuestra tierra; simplemente considero necesario que en lo sucesivo ellos reciban el apoyo deportivo y económico que merecen para que se centren solo en lo deportivo.

Deja tu opinion

  • https://cloudstream2036.conectarhosting.com:7096/stream?type=http&nocache=14
  • Música y Noticias