
Una verdadera novela en medio de la pandemia, es la que ha escrito el Deportes Tolima y su ídolo Danovis Banguero. Todo empezó desde el inicio de la cuarentena nacional, cuando al jugador y a sus compañeros, les pidieron bajar sus ingresos, como apoyo al club, el cual no tendría bases sólidas para sostenerse con normalidad.
Varios jugadores del plantel, dieron el OK al presidente Gabriel Camargo, sin embargo, el lateral izquierdo, no vio con buenos ojos la medida, pero a ‘regañadientes’ habría aceptado. Ante las extensiones del aislamiento preventivo obligatorio, y a la falta de fútbol, las directivas de nuevo pidieron un reajuste.
Ante esta noticia, Banguero no aceptó y tomó la decisión de pasar su carta de renuncia, resaltando: “Respetado señor Camargo, le comunico mi decisión de dar por terminado por causas imputables al empleador, el contrato de trabajo a término fijo con salario integral, que me vincula con la institución que usted representa, decisión que se hará efectiva a partir de la fecha; la terminación del contrato está fundamentada por los graves incumplimientos de sus obligaciones como empleador”, destaca la carta enviada al exsenador.
En respuesta, el club destacó en sus redes sociales, “(…), a pesar de ser un jugador querido por nuestra institución, fue el único miembro de la plantilla que no apoyó las medidas del club para sobrellevar los efectos generados por la pandemia del covid-19, estas solo buscan garantizar el funcionamiento y sostenimiento de la institución, para la conservación de la mayoría de los puestos de trabajo”.
Pasaron cerca de tres semanas y los acercamientos fueron efectivos, pues el jugador, reconsideró su medida y aceptó una nueva propuesta del club tolimense, por tal motivo regresó a la ciudad de Ibagué para iniciar el proceso de acoplamiento físico en campo.
Desde el lunes 27 de julio, Banguero retornó a la capital musical y su primera acción, fue tomarse la prueba PCR de covid-19. Una vez el resultado sea negativo, el jugador quedará a las órdenes del técnico tolimense, Hernán Torres.