Uncategorized

Una bicicleta para volar

Liberar el alma bajo los ciclos del pedaleo constante; buscar mi espíritu en la velocidad del pedal, ampliando mi percepción del mundo estático;  trazar nuevos caminos rodados en bici para sostener la mirada en el paisaje. Este podría ser el inicio de un poema para  la bicicleta y el mundo que ella crea a su alrededor.

Etimológicamente la palabra bicicleta es un hibrido tomado del latín Bi(dos) y del griego kukaos(kiklos=rueda) vehículo de dos ruedas. El idioma inglés lo pronuncia como bicycle. El francés le agrega diminutivo -ette, llamándole bicyclette y de ahí se adapta al español como bicicleta.  

Desde la creación de la bicicleta en 1817 como alternativa económica a la manutención del caballo como elemento a la movilidad, la humanidad ha visto en este hermoso descubrimiento mecánico un sistema de movilidad recreativo, deportivo y ahora en el siglo XXI una alternativa ambiental para la movilidad urbana sostenible.  (La bicicleta del barón alemán Karl von Drais, de 1817, está considerada como la pionera. La llamó “máquina corredora” (laufmaschine en alemán) y la prensa la llamó Draisine o velocípedo.)

La bicicleta es un instrumento de integración físico espacial y mensajes de cambios psico-sociales. Desde su aparición siempre ha estado articulada en procesos comunitarios interesantes y exploratorios sobre maneras de convivir más conectados como sociedad;  ahora se abre a las nuevas formas de pensar los nuevos planteamiento urbanos en los procesos de creación de la ciudades del futuro, donde el paradigma es el peatón y la bicicleta, donde el vehículo sale de nuestras alternativas urbanas en lo que concierne a la movilidad.

Nuestra ciudad musical, no está muy alejada de estas dinámicas socio culturales y se ha percibido desde hace ya varios años, que diferentes grupos amantes de la bicicleta rodean los nuevos conceptos urbanos de la ciudad de Ibagué, bajo el principio de la implementación de la bicicleta como un sistema social y amigable ambientalmente, con todos los aspectos que el término ambiental conlleva y las formas de ser utilizado en nuestra contemporaneidad.

Grupos como Entándem: ciclismo urbano, Bicionarios,  BicIbagué, Amiextrem, bikehouse, la Unión, trocha, senderos y pola, evolution fixed entre otros, están comprometidos con esta causa. Cada quien afronta el desafío desde su búsqueda deportiva y social, pero todos con un enfoque articulador que es el hermoso caballito de acero que nos lleva a rodar por las calles de nuestra amada ciudad musical, en bicicleta.   

 Ibagué cuenta con un territorio urbano y rural adecuado para implementar el uso de este vehículo alternativo, citando un ejemplo puntual se puede mencionar que, desde la alcaldía hasta la altura de santa Ana hay 15 km por la avenida quinta y la pendiente máxima es de 12% y hay variaciones de recorrido con un porcentaje de pendiente 7%, esto nos da un panorama muy positivo para proyectar y saber que Ibagué es una ciudad para movilizarse en bicicleta.

Solo nos falta poder complementar un buen sistema de bici carriles, que sea acorde con las necesidades de la población, que realmente incluya al bici usuario, que todas las alternativas que se están gestando en la municipalidad en lo relaciona a infraestructura vial, nos den una ciudad para volar por medio del pedal.     

 

 

 

 

Deja tu opinion

Publicaciones relacionadas

  • https://cloudstream2036.conectarhosting.com:7096/stream?type=http&nocache=14
  • Música y Noticias